Está siguiendo una dieta cetogénica y a menudo siente la falta de algo dulce en su comida o en sus bocadillos? Uno de los principales desafíos de una dieta similar es encontrar meriendas y postres que sean compatibles con el objetivo de mantener el cuerpo en un estado de cetosis. Para esto hay nuestros dulces Nuvola Cero, ya listos en prácticas porciones, pero a veces se tiene ganas de preparar algo con las propias manos que finalmente se llama POSTRE.
La tarta cetogénica que te proponemos en la receta de hoy es la respuesta a este reto personal tuyo para crear un delicioso postre proteico, perfecto tanto para un sabroso desayuno antes de correr al trabajo como para las fiestas en compañía de amigos.
Rica en sabor y proteínas, es una opción deliciosa y saludable que te permite satisfacer tus deseos de postre sin desviarte de la dieta keto. Con algunos pequeños trucos también puede ser la solución ideal para las personas que no pueden consumir gluten, lactosa, azúcares y levaduras.
Cuando te apetezca algo dulce durante tu dieta cetogénica, sabes que puedes disfrutar en total relax y sin culpa alguna de una rebanada de este delicioso pastel proteico. Una forma deliciosa de disfrutar del placer mientras sigues trabajando para alcanzar tus objetivos de salud junto con tu profesional sanitario.
A diferencia de los dulces tradicionales que pueden estar cargados de azúcares y carbohidratos, este pastel está preparado con ingredientes cuidadosamente seleccionados. El uso de eritritol como edulcorante, por ejemplo, le permite obtener la dulzura deseada sin afectar sus niveles de azúcar en sangre.
La Harina Cero en lugar de la tradicional te permite evitar el uso de gluten para una posible celiaquía y el yogur griego como guarnición es la opción ideal para quien, como tú, debe elegir ingredientes permitidos en una dieta cetogénica.
Cómo preparar tu pastel cetogénico casero:
Empieza por mezclar el eritritol, la mantequilla clarificada, las yemas de huevo y las claras de huevo en un tazón. Asegúrate de que todos los ingredientes estén bien mezclados.
Añade el aceite de girasol, la sal y el vinagre a la mezcla y revuelve enérgicamente. Esta combinación le dará a tu pastel una textura única y sabrosa.
Una vez que los ingredientes líquidos se combinen bien, tamiza la harina cero sobre la mezcla y revuelve hasta obtener una consistencia suave y sin grumos. Este paso es crucial para obtener un pastel ligero y esponjoso.
Vierte la masa en el molde previamente engrasado y enharinado. Asegúrate de que se distribuye uniformemente.
Hornea la tarta en un horno precalentado a 190 °C durante unos 35 minutos o hasta que esté bien cocida.
Una vez dorada, saca la tarta del horno y deja que se enfríe.
Para completar tu pastel cetogénico súper proteico, unta generosamente el yogur griego en la superficie y adorna con tu mermelada de fruta favorita. El toque final perfecto que hará que tu pastel sea aún más delicioso.
Ahora solo tienes que cortar una rebanada y saborearla en el pacífico silencio de tu cocina o compartirla en una fiesta con las personas importantes de tu vida! Nunca renunciar al sabor de un buen pastel casero.
¡Buen apetito!
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